domingo, 7 de febrero de 2010

Prisionero

Un tierno bienestar se respira
una lengua desconocida
se escucha acariciando el viento
una conocida pica
los confines de mi depresión
el sol de la mañana
acaricia el cuerpo
me recuerda tu calor
ese que no conozco
pero mi cuerpo recuerda
cada fiera cuida su madriguera
la llorona vela mi cama
yo cuido la casa
ella la conmueve
me le aferro
y te recuerdo con dolor
mi garganta esta cerrada
mi boca amarga
el consuelo
es un lujo muy escaso
en mi cuerpo que ya no siente
aunque aun aprecie la ternura
al estilo gourmet exótico
me duele el cansancio
de los dedos de los pies
a la curvatura de las pestañas
de la punta de las botas
a los olanes de las bragas
El médico ha recomendado
que olvide el sentimiento
y aturda mi cabeza
para que no piense en ti
para que no duela tu ausencia
y no recuerde que te amo
y por respeto a la decencia que no tengo
consiento que seas un prisionero.

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