viernes, 31 de julio de 2009

Martha la de los cuchillos

Alguien debia hacerlo
matar al siguiente minuto
sacarme a golpes del mundo
¿Pero tenias que ser tu?
¿Tenias que ser así?
No ha servido para nada
¿No ves, sigo respirando igual?
por mi no se altera el azul del cielo
y no me altero por el duro suelo
no, nunca y jamás.
Ni cuando la madre
me escribio en las manos
con letras de fuego mi destino
Me preguntó con tristeza
¿Y lo frío del viento quisiste probar?
yo que soy un animal salvaje
y puse cadenas en mi cuello
un fuste en tu mano
y una silla en mi lomo para ti.
Duzura. ¿Para qué?
Como si la crueldad pasada se satisfaciera
como si se pudiera confian en quien vomita rabia
Nunca confies en Martha
la de los guantes de seda
en ellos guarda cuchillos
puñales, hilos de menta.
No es tu culpa que en el tiempo
solo un consejo tuvieras
pero es cierto y te reprocho
que su crueldad nunca vieras
Y aun viendola inconsciente
caprichos le consintieras.
Amor de las mil lunas
de las cadenas del tiempo
hilo y agujero de mi pena.
Dolor y muerte te pido
no me des más y te rezo.

No hay comentarios: